La nueva lógica de los Libros de Texto Gratuito

Podemos afirmar que en los últimos decenios se instaló en el Sistema Educativo Nacional una especie de racionalidad tecnocrática (muy afín al neoliberalismo) en la que los especialistas disciplinares de ciertas corrientes formulaban el qué, el cómo, el dónde y el cuándo enseñar.

En este contexto, el libro de texto se convirtió en el instrumento que transmitía las prescripciones de los especialistas para traducirlas en el quehacer de los docentes, tal como afirma Rosa María Torres, reduciéndolos a meros implementadores de currículos y textos escolares, facilitadores de aprendizajes en cuya definición y orientación no participaban ni tenían control.

Así se privilegió la inversión en textos escolares (mejor si eran autoinstructivos, en tanto minimizaban la intervención docente) y la capacitación de los maestros en su manejo bajo la lógica de que era más seguro, barato y fácil que intentar la compleja vía de la reforma curricular como la que supone la Nueva Escuela Mexicana.

Tanto arraigo cobró este paradigma que el día de hoy es muy difícil imaginar, sobre todo para estos especialistas, que los nuevos libros de texto gratuito están elaborados desde otra lógica.

Primero, no se trata de libros prescriptivos que el maestro tiene que aplicar “como están”.

Tampoco guardan una secuencia lineal en la progresión de los aprendizajes.

Más bien, se trata de un rico conjunto de ejemplos que le permiten al maestro tomar aquello que considere útil dadas las características de su contexto, hacer, a las propuestas contenidas en los materiales, todas las modificaciones que estimen necesarias y animándolo a realizar sus propios desarrollos didácticos, basado en sus conocimientos y experiencias.

Por su parte, la estructura de los libros Nuestros saberes es el de una enciclopedia que puede ser consultada tanto por el alumno como por sus profesores, padres o tutores.

Estos libros tampoco guardan un orden secuencial, por progresión de aprendizajes, sino que están organizados por temas.

Otra de sus características, propia de las enciclopedias, es su concisión y síntesis, con el objetivo de condensar el máximo de información posible.

Si las obras anteriores eran tan extensas es porque, como ya se dijo, su intención era conducir el aprendizaje del alumno de la manera más detallada posible, pero, sin considerar su ritmo de aprendizaje, sus intereses, sus experiencias, ni el contexto en el que vivía, haciendo a un lado o minimizando, de esta manera, la mediación docente.

Finalmente, una de las intenciones que se persigue con la colección de libros Nuestros saberes, es que al final de los seis años de educación primaria, cada familia cuente con un acervo de conocimiento que, para muchas de ellas, difícilmente estaría a su alcance por otros medios.